Conjuntivitis Folicular en Felinos
La conjuntivitis
folicular en gatos es una afección ocular caracterizada por la hipertrofia de los folículos linfoides en
la conjuntiva, especialmente en la cara posterior del tercer párpado. Se trata
de una respuesta inmunomediada de la conjuntiva ante irritantes crónicos,
infecciones o alergias. Si bien puede afectar a gatos de todas las edades, es
más frecuente en gatos jóvenes debido a la hiperreactividad del
tejido linfoide en desarrollo.
Causas y Factores
Predisponentes
Las principales causas de
la conjuntivitis folicular en gatos incluyen:
- Infecciones virales:
El herpesvirus felino tipo 1 (FHV-1) es
uno de los principales agentes involucrados, causando inflamación crónica
de la conjuntiva.
- Infecciones bacterianas secundarias:
Como las provocadas por Chlamydophila felis o Mycoplasma
spp., que pueden agravar el cuadro.
- Alergias:
Sustancias como el polvo, el polen o productos químicos pueden generar una
reacción inflamatoria crónica.
- Irritantes
ambientales: Humo, contaminación o cuerpos extraños
en el ojo pueden desencadenar la hiperplasia folicular.
- Inflamación
crónica: Cualquier conjuntivitis no tratada
adecuadamente puede evolucionar hacia una forma folicular.
Síntomas Clínicos
Los
signos clínicos de la conjuntivitis folicular en gatos incluyen:
- Secreción ocular
mucosa o mucopurulenta, que puede ser
intermitente o persistente.
- Enrojecimiento e
inflamación de la conjuntiva (hiperemia conjuntival).
- Engrosamiento del
tercer párpado, debido a la presencia de folículos
reactivos en su cara interna.
- Prurito ocular y
parpadeo constante (blefaroespasmo).
- Fotofobia (sensibilidad
a la luz).
- Epífora
(lagrimeo excesivo).
Diagnóstico
El
diagnóstico se basa en:
- Examen
oftalmológico completo, donde se evalúa la
conjuntiva con lupa o lámpara de hendidura para identificar la presencia
de folículos inflamados en el tercer párpado.
- Pruebas de
fluoresceína, para descartar úlceras corneales
que podrían estar asociadas con infecciones como el herpesvirus.
- Citología
conjuntival, para identificar agentes infecciosos
como Chlamydophila
felis o Mycoplasma spp..
- PCR o cultivo
bacteriano, en casos de sospecha de infecciones
crónicas o recurrentes.
Tratamiento
El
tratamiento de la conjuntivitis folicular en gatos depende de la causa
subyacente:
- Tratamiento
antiinflamatorio: Se emplean colirios o ungüentos oftálmicos con corticosteroides,
como la dexametasona, en casos de inflamación severa sin infección activa.
- Terapia
antibiótica: Si hay infección bacteriana secundaria,
se usan antibióticos tópicos como la tetraciclina, la doxiciclina o el cloranfenicol,
según la sensibilidad del microorganismo.
- Lubricación ocular:
Para reducir la irritación y mejorar la estabilidad de la película
lagrimal, se emplean lágrimas
artificiales.
- Cirugía:
En casos graves donde los folículos persisten y causan molestias crónicas,
se puede realizar un desbridamiento
mecánico de los folículos hiperplásicos.
Pronóstico y Prevención
El
pronóstico es favorable en la mayoría
de los casos con un tratamiento adecuado. Sin embargo, si la causa subyacente
no se controla (como el herpesvirus), pueden presentarse recaídas. Para
prevenir la conjuntivitis folicular en gatos, se recomienda:
- Mantener
vacunaciones al día, especialmente
contra el herpesvirus felino.
- Minimizar
la exposición a irritantes
ambientales y alérgenos.
- Evitar
el contacto con gatos infectados para reducir la transmisión de
enfermedades infecciosas.
- Realizar
controles oftalmológicos periódicos en gatos predispuestos.
La conjuntivitis
folicular en gatos es una afección ocular común que requiere un
diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado para evitar complicaciones a
largo plazo. Con un manejo temprano y una buena prevención, los gatos afectados
pueden recuperar su salud ocular sin secuelas significativas.
Comentarios
Publicar un comentario